Palabras

Son palabras, columpiándose en el mar de mi mente,

me avisan nada más que el remedio es volver a donde él está,

jugando encantado en la herida de este corazón que no sana,

mofándose de mí, mientras llora en el sollozo...

Palabras, me cuentan que miras mientras cierras los ojos,

que en la historia que intentamos quepar, todavía existen algunos cimientos

que de vez en cuando, suelen pedir a gritos que retornemos,

a esos lugares en los que hace un año debimos estar

Pero yo tímida y descarada le miento al recuerdo,

fragmento lo fragmentado, recojo lo recogido,

y le susurro al viento que me dé otra oportunidad

para volver a mojar tus manos, besar tus labios...

Este color tan pueril que me sonroja con la fobia,

esta filosofía tan diferente que me arrastra con tu candela,

este cerebro tan inútil y prepotente que no entiende lo que el corazón quiere.

Estoy por acabar por asesinarlo todo y vivir por nada.

Hoy hace tanta soledad, que las palabras se suicidan

las palabras lloran, por los poemas que se mueren,

¡Estás triste Ariel! no lo niegues, no berrinches más,

no quieras que coagulen más esas gotas de tiempo que tienes,

no intentes mentir más, no escondas lo ilógico

No permitas que la dama de lo oscuro permanezca en tu sien

mantén ese motivo por el cual escribes,

la inspiración que hoy, como otros días te ha llegado por celebrar

ya un año de tu maldita muerte...

Las palabras me esconden, ofuscan la realidad, y la vuelven sueño,

y es un sueño tan real que se vuelve nada,

y quedan solo los silencios, esos ruidos que siempre quedaron ganando

en aquel juego de los incompletos

Como si el mundo tratara de ponernos las palabras para poder despertar a los muertos,

yo me valgo de las mías para tenerte siempre en mi,

y quitarme ese miedo que poseo de quedarme de una vez por todas sin ti...

No quiero tener que inventarte un nuevo nombre o enseñarte a no depender de mi...

Y aunque yo tampoco te tenga conmigo, te diré que siempre has estado a mi lado,

formando un puzzle completo, porque yo no huyo

y sin embargo corro al alma con un cuchillo un tanto viejo,

es que sucede que escucho al recuerdo llorar y soluciones se van como palabras en el aire...